El músico rosarino de larga trayectoria en la escena del jazz editó un primer registro que cuenta con la participación de Leo Genovese, Mariano Loiácono, Jaun Bayón, Franco Espíndola, Julio Kobryn y Sebastián Mamet.

Leonardo Piantino lleva en sus espaldas una extensa carrera como saxofonista de jazz. Inmerso en una escena que en los últimos años experimentó un gran crecimiento en cantidad y calidad de los músicos que la integran, Piantino se dedicó durante años a interpretar composiciones de otros y a realizar arreglos. “En aquél momento era muy reticente a componer”, confesó. Y señaló que más allá de eso, los arreglos de jazz requieren un trabajo que se acerca mucho al de la composición: “Cuando se hace ese trabajo en el jazz se modifican mucho los temas;  son arreglos muy creativos. Se espera que uses todo lo que hay para usar, y tenés una paleta que es amplísima y los límites son tu propia creatividad o tu propio deseo”, explicó quien obtuvo el reconocimiento del público local por varios proyectos, entre otros, su octeto Pipo Piantino y sus Ratas Calientes en el que abordaba, junto a otros músicos, la amplia discografía del compositor estadounidense Frank Zappa. Fue en 2004 que Piantino se sentó por primera vez “con un lápiz y un papel en un pentagrama, a escribir”. Ahí compuso “Canción para el quinteto”, un tema que hoy ocupa el primer lugar entre los tracks de Ya es hora, su primer disco que, editado a través del programa de coproducciones de la Editorial Municipal de Rosario, debutará el miércoles oficialmente en la ciudad. El material lleva consigo toda su formación académica que, entre otras cosas, cuenta con su paso por la prestigiosa academia Berklee (Boston) con Shannon Le Claire y Bill Scism, así como el hecho de haber asistido a clínicas y clases magistrales dictadas por Joe Lovano, David Liebman y George Garzone. El flamante registro también cuenta con la participación de un seleccionado de músicos prodigios de la escena local, nacional y hasta internacional del jazz. “El disco intenta reflejar lo que vengo haciendo con el jazz desde que empecé a tocarlo hasta ahora. Tiene composiciones que ya tienen un tiempo, que nunca habían sido grabadas por mí, pero que han sido tocadas en vivo por distintos músicos”, puntualizó quien se rodeó de instrumentistas que cumplían con todos los  requisitos. Uno de esos requisitos, que es muy importante, es que cada uno de ellos es referente en su instrumento en el jazz. En el caso de Leo Genovese (pianista) es a nivel mundial, el caso de Mariano Loiácono (trompetista), Jaun Bayón (contrabajo) y Franco Espíndola (trombonista) a nivel nacional. Y a nivel local estamos Julio Kobryn (saxofonista), Sebastián Mamet (baterista) y yo. Lo que busqué fue que sean los mejores músicos que pueda conseguir a nivel calidad. Y por otra parte, la característica que tienen estos músicos es que, por suerte, son amigos míos, gente que tiene que ver con mi vida. Personas a las que levanto el teléfono, les hablo sin formalidades. Además, ellos han tocado, no todos pero sí la mayoría, estos temas en vivo antes de grabarlos”. Escena con empuje Piantino empezó a estudiar saxo en 1997. En esos años, según recuerda, la escena del jazz en la ciudad tenía grandes referentes pero pocos jóvenes interesados en continuar ese legado. “Cuando empezamos a juntarnos a tocar pensábamos: «Con el jazz no pasa nada»”. Pero con el paso del tiempo eso cambió: “Hoy estamos mejor, hay mucha juventud en la escena”, dijo. “Lugares para tocar con buen trato faltan, pero jam sessions hay bastantes porque muchos de los músicos jóvenes que surgieron en los últimos años son emprendedores. Generan y negocian los espacios. Hay una generación posterior a la mía que generan ellos mismos los espacios en lugares que existen de antes, por supuesto”, contó. Y aclaró: “Siempre haciendo la salvedad que es muy difícil ganar plata con esto. Que ser músico sea considerado un trabajo es una eterna lucha”. En paralelo a su carrera como compositor e instrumentista, Piantino es docente y eso le brinda un contacto constante con aquellos que están empezando en la profesión. Consultado sobre si considera que la generación que hoy mantiene viva y en crecimiento la escena del jazz en la ciudad tiene una continuidad en las generaciones que vienen, opinó: “Hay una continuidad en el interés. Mi generación estaba muy interesada en el jazz, pero éramos muy pocos en Rosario. Hoy en día está lleno de músicos de jazz y todos van muy en serio, toman clases de música y, los que pueden, viajan para estudiar afuera. Se está tocando de una manera que cambia radicalmente lo que era el panorama jazzístico de la ciudad cuando nosotros empezamos, éramos pocos y ahora hay chicos y chicas que están tocando súper bien. Son esas cosas que no sabes qué puede pasar después pero que seguramente va a ser bueno”. Para disfrutar en vivo La presentación oficial de Ya es hora, un material que ganó la categoría jazz del concurso de música 2017 del Fondo Nacional de las Artes, tendrá lugar el miércoles. Será un concierto en el que participarán todos los talentosos músicos que formaron parte del disco, interpretando los siete temas del material: “El jazz tiene mucho de improvisación así que si bien hay cosas que se respetan, los mapitas de la música que yo compuse, lo qué va a tocar Leo Genovese yo no lo sé. Sé que va a ser algo bueno y que seguramente será mucho mejor de lo que yo escribí”, concluyó entre risas.